Autoridades de Florida, Estados Unidos, investigan las muertes del empresario venezolano-estadounidense José Manuel Gonzalez Testino, de 53 años, y su hijo de 3 años, cuyos cuerpos fueron localizados en un lujoso apartamento de Coconut Grove, Miami.
Oficiales que hallaron los cuerpos estiman que, por cómo observaron las heridas de bala, se habría tratado de un homicidio seguido de un suicidio.
En 2018, Testino había sido detenido en el Aeropuerto Internacional de Miami por sobornos a un funcionario de la empresa Petróleos de Venezuela (PDVSA) a cambio de un trato comercial favorable.
El empresario controlaba múltiples compañías y fue acusado en EEUU de conspirar para violar la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero (FCPA).
Según una denuncia penal presentada en el Distrito Sur de Texas, Testino y un cómplice pagaron al menos USD 629.000 en sobornos a un exfuncionario de PDVSA a cambio de que este adoptara medidas para “dirigir” proyectos de la compañía petrolera a sus empresas, darle prioridad a la hora de recibir pagos y otorgarle contratos de PDVSA en dólares estadounidenses en lugar de bolívares venezolanos.
La prensa local también señala que Testino estaba colaborando con la justicia de Estados Unidos en investigaciones sobre un esquema de corrupción vinculado a PDVSA y su subsidiaria en EEUU, Citgo.
Por su parte, la periodista Maibort Petit señaló que Testino se había declarado culpable de lavado de dinero ante un tribunal estadounidense y que una sentencia estaba prevista para el 24 de marzo de 2023.